Con vos es diferente...
Todavía no te fuiste de ningún lado. Probé tirar tus cosas. Probé odiarte y que me odies. Ya no hablamos hace rato, y sin embargo estás anclado en cada rincón de mí ser. La vida extrañandote es una tortura , porque ya no estás y los días marcan una distancia entre los dos , pero yo cierro los ojos y te siento al lado mio.
Cada vez que paso cerca de tu casa , te hablo , creyendo que telepaticamente me escuchas. Te ruego que vuelvas, como sea pero que vuelvas porque yo no sé hasta cuándo voy a poder aguantar. Llevo la cuenta de los días que no hablamos, como estar en abstinencia.
Ya no te nombro. Así las personas piensan que te olvidé. Es incómodo explicar que un amor así no se olvida.
Hay una sola cosa que me hace despertarme todos los días y seguir, la esperanza de que vas a volver.
Cuando me asomo al balcón sea la hora que sea también te hablo, porque estás cerca. Tu cuerpo está cerca del mío. Tu alma y la mía se llaman, pero la distancia de la palabra es tan grande que yo tengo que imaginar un mundo donde realmente no estás.
Así se pasan los días... Pensando cómo hacer tú duelo. Como soltarte. Como dejar de extrañarte.
Definitivamente todo lo que hice para despedir a mí amor anterior funcionó.
Con vos es distinto...
Te despedí por un ratito porque te espero , te siento, te sueño, te extraño, te duelo.
